Eduardo García Campos es una persona extraña, es mexicano y piloto de aerolíneas comerciales.
Un día decidió hacer una silla y participar con ella a un concurso internacional de diseño. Como la persona extraordinaria quees, ganó el primer premio gracias a su fantástica creación.
Directamente desde el Art Nouveau del siglo pasado, aquí está su reinterpretación de la mariposa monarca: es liviana al igual que la misma mariposa, pero muy duradera porque la silla de Campos ha sido realizada con una sola pieza de aluminio.
Le tomó 3 años construir esta magnífica silla. Tres años y muchos vuelos de la fantasía.